jueves, 6 de septiembre de 2007

Vigilancia gratuita

Casualmente, he leído o releído en los últimos días un par de textos sobre la crítica literaria.

Tiendo a creer, aunque quizá esté equivocado, que sé leer. Recuerdo haber aprendido de pequeño. Por eso, suele exasperarme que alguien escriba un texto para explicar a quien lo lea que en realidad no sabe leer. No está (estoy) capacitado para entender lo que pone en un texto y por eso es necesario que él y otros como él, que han estudiado mucho y saben interpretar las "periferias de los signos semióticos en conjunción", o algo así, me expliquen las cosas. No es posible, se me dice también, que yo pueda leer una "buena" obra sin que alguien me explique lo que pone ahí. Tampoco es posible que yo pueda leer una obra cualquiera, pues soy a lo sumo un "aficionado" a la lectura y no puedo, ya digo, leer literatura de todo tipo, sino sólo de un tipo especial que es la que leo yo. Y me hace una falta enorme que venga alguien a decirme, entre "miles" de obras, cuáles son las que tengo que leer, no sea que vaya a perder el tiempo.

A mí, que ya me fastidia haber pagado dinero por "Qué leer y por qué" y encontrarme que Bloom, aun siendo un viejecito simpático, da por hecho que tengo una copia de la novela X, en la cual me recomienda numerar los capítulos a mano para seguirle mejor.

Siento ponerme cenizo, pero cuando esa gente tenga la misma soltura con un libro de matemáticas que yo de gramática, lingüística o teoría de la literatura (que no es mucha), que me busquen para seguir la conversación. A ver si les cunde.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Es por estas y otras cosas que yo solo veo peliculas porno.
Esas las entiendo a la primera sin que nadie me la explique.

Ángel M. Felicísimo dijo...

Pedro, que no te enteras, que somos deficientes simbólicos. Por eso, cuando leemos lo de las periferias semióticas conjuntivas esas, en vez de asentir con gravedad ante la profundidad de la frase nos da por tirarnos al pacharán en medio de un ataque de risa.

JuanPablo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
JuanPablo dijo...

al primero que me diga "deficiente simbólico" le pido que me interprete -(|u_k^{\Delta}|^{p-2}u_k^{\Delta})^{\Delta}= \lambda_k |u_k|^{p-2}u_k^{ \sigma}, y no me meto con la periferia conjuntista, donde tengo condiciones del tipo \alpha |u_k|^{p-2}u_k(a) + \beta |u_k^{\Delta}|^{p-2}u_k^{\Delta}(a) = 0 = \gamma |u_|^{p-2}u_k(\rho(b))+\delta |u_k^{\Delta}|^{p-2}u_k^{\Delta}(\rho(b))

Pedro Terán dijo...

Aprovecho para comentar que el título del libro es "Cómo leer y por qué".

La lectura de una obra y su estudio son dos actividades radicalmente distintas. La ideología de que el lector debe recurrir a una casta de mediadores que, se supone, son expertos en todos los libros de la historia porque han estudiado "hasta diez años", como decía en ese artículo, me saca de quicio.

Cualquier científico sabe que con diez años de estudio uno no tiene ni idea de nada. Y eso, en un territorio en que traspasar conocimiento es mucho más fácil.

Anónimo dijo...

También la televisión nos dice con más vehemencia qué ver y cómo. A lo que yo replico en sempitérnico y denuedo estrambote versitil:

TELEBASURA
Alegría estructural
la broma danzante
jocosa e hilarante,
la noche artificial.
¡Asco!, sonrisa cultural
la gracia insultante
indigna y farsante,
el día telebasural.
Regalos sobre ruedas
¡éxtasis!
billetes como churros
¡éxtasis!
ruedas y churros y más
¡éxtasis!
Vuelvan en un instante
vomiten su privacidad
que les aplaudimos.